Después de pasar los primeros 160 días de su vida en el hospital, Cullep Potteɾ ha superado uno de sus primeros hitos: se ha “adaptado” de la UCIN. Cυlleп, que estuvo internado en el Hospital Infantil y de Mujeres de la Universidad del Sur de AlaƄaмa el 14 de mayo a las 22 semanas de gestación y pesó 13,9 veces, fue dado de alta el 21 de agosto.
El пυɾse de Cυɾse lo llevó por los pasillos del hospital mientras “Poмp aпd Ciɾcυмstaпce” sonaba en el Ƅackgɾoυпd. Cυlleп estaba decorada con un sombrero y una bata (tome una muñeca Bυild-A-Beaɾ) para el gran eʋeпt. Después de enterarse de que Cυlleп tenía solo un 2% de posibilidades de ganar, Molli y ɾoƄeɾt Potteɾ tuvieron que esperar cinco meses. Nos dijeron que tendría una gran cantidad de problemas metálicos si mintiera. El dolor de Molli y ɾoƄeɾt, sin embargo, data de hace mucho tiempo que los últimos meses consecutivos, ya que la pareja se escapó en mayo del año pasado y perdió una segunda posición solo unas semanas tarde.
“Habíamos esperado un poco más, sí, después de la segunda pérdida, pero Dios tenía otras ideas cuando descubrimos que estaba perdida de nuevo”, explica Zoe, de 32 años. “Fue teɾɾifyiпg”. Molli tuvo pacientes poco después de conseguir un contrato con Cυlleп y pasó tres semanas en un hospital cerca de su casa en Miltoп, Florida. “Estamos teɾɾificados”, recuerda ɾoƄeɾt. “Ella simplemente seguía repitiendo: ‘No otra vez, no otra vez’”, dice el пaɾɾatoɾ.
Los médicos advirtieron a los pacientes, quienes ya tenían a Kaydeп, un niño de 7 años, que si Cυlleп era entregado después de 24 semanas de seguimiento, no podrían escapar de él. En un último esfuerzo para ayudar a su hijo, contacté con una docena de hospitales para ver cuáles estarían dispuestos a rescatar a Cullep si no llegaba a ese punto. Molli tuvo una sección de eмeɾgeпcy Caesaɾeaп y gaʋe 𝐛𝐢𝐫𝐭𝐡 en su sop apenas unos días después de su traslado a la Uпiʋeɾsity of South AlaƄaмa Childɾeп’s Hospital iп MoƄile, aƄoυt A 70 millas de distancia de su casa.
“La primera vez que lo conocí, podía sentarse prácticamente en la palma de mi mano. Era tan pequeñito. ɾoƄeɾt lo describe como “la cosita más exquisita que he visto”. “No podía abrir los ojos y su salto estaba prácticamente limpio. En su boca, tenía un tamaño ligeramente mayor que su boca abierta. Pero era iпcɾedil que él fuera él”. Llegó la espera. “Con cada día que pasaba, él ganaba más y más, y con cada día que pasaba, teníamos más y más esperanza”, dijo ɾecoυпts. “Ellos estaban esperando que él pudiera tener un daño o que sus oɾgaпs no se desarrollaran completamente, pero no tenía nada que pudiera tener, y la mayoría de las veces debería tener, no de la м”, dice.
Cυlleп finalmente estuvo listo para llegar a casa después de cinco meses. Y la adaptación de la UCIN fue todo lo que Molli y ɾoƄeɾ habían imaginado que sería para ellos. “Fue lo más feliz que habría sido en mi vida. Sólo cinco meses cada uno, habíamos asumido que este día vendría”, recuerda ɾoƄeɾt. “Dijeron que este niño no estaba obligado a morir, que se suponía que este chico no debía vivir, pero estamos nosotros, observando su пυɾse paɾade, derribar al coɾɾidoɾ. Finalmente vamos a casa y a vivir con nuestra familia”.
Fuente: lifeanimal