Los arqueólogos han hecho un descubrimiento revolucionario bajo los abismos de Egipto. Un equipo que explora un laberinto de cámaras subterráneas recientemente descubierto ha encontrado estatuas imponentes que parecen un mito que se filtra en los registros históricos. Estas estatuas, adornadas con rasgos extraños y jeroglíficos intrincados, sugieren la existencia de una civilización avanzada o quizás de visitantes que conocen la historia.
Las estatuas, talladas en perfecta simetría a lo largo de las paredes, presentan calaveras alargadas, grandes ojos de serpiente y rasgos anatómicos detallados. Los jeroglíficos antiguos que las rodean contribuyen al epígrafe, mostrando símbolos y lenguajes conocidos tanto por egiptólogos como por científicos. La escena se asemeja a una sala sagrada o ceremonial, posiblemente un lugar de descanso para los seres que los antiguos egipcios pueden haber adorado como dioses o temido como visitantes de otro mundo.
La Dra. Lipa Ashour, arqueóloga principal, compartió sus primeras impresiones del sitio: “Este descubrimiento desafía nuestra comprensión de las civilizaciones antiguas. El arte y el simbolismo van mucho más allá de lo que hemos encontrado antes. “Plantea preguntas sobre quiénes eran estos seres y cómo se relacionan con las civilizaciones más antiguas de la humanidad”.