Salarrea muestra su figura regordeta con una prenda de dos piezas.
Con cada elegante movimiento, abraza sus curvas, irradiando una sensación de empoderamiento que cautiva a los espectadores. Los colores vibrantes y los detalles intrincados de su vestido acentúan su belleza natural, llamando la atención sobre cada curva y contorno. La confianza de Salarrea es contagiosa e inspira a otros a abrazar sus propios cuerpos únicos con orgullo y confianza. Mientras navega por la habitación, llama la atención sin esfuerzo, lo que demuestra que la belleza viene en todas las formas y tamaños.